lunes, 26 de julio de 2010

Penas

Cada vez que miro la veo como se ven a las preguntas: una mirada llena de oscuridad perdida en la luz de algún antiguo reflejo, dejada a un lado por mi paranoia que me ciega la mayoría de las veces.

Siento que con el tiempo no he logrado pasar esa mirada y complemento la pintura con mis bromas y sus risas, el tiempo me ha vuelto superficial y vacío.

La pena me atormenta: cuando se acerque no la veré, cuando me hable no la escucharé, cuando me toque no la sentiré ¡Sentemonos entonces a mirar preguntas y que el silencio le conteste al infinito!.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mi experiencia me dice que, con el tiempo, todos, irremediablemente, nos volvemos superficiales y vacíos. Aún cuando no queremos verlo.

Saludos

J.