sábado, 14 de junio de 2008

Pensamiento de un sabado muriendo en domingo.

En una oscura laguna vive una rana, de su croar saltan ondas que asfixian la inmensidad. Desde eljos siento su canto quejumbroso que habla de pantanos y de tiempos pasados. Los tiempos pasados siempre fueron los más sabios, se quedaron fríos e innertes dentro de nosotros como cristales y brillan calentando la esperanza que el futuro es su plagio. 

Que se pude pensar que llegará mañana? El ayer no ha de ser confundido y tampoco se repetirá, los lugares donde crecen huellas jamas seran pisados 2 veces y regresar solo seran cadenas al cuello. Oh mal logrado destino que nos impulsa a desear el mañana y no vivir el hoy. Pues hoy es solo la sensación de que mañana ya es ayer.

Resuenan las campanas, como ojos que lo ven todo castigan de forma pura los corazones, despiertan al pecado dormido y cierran con telon de hierro las finas mentes de quienes las buscan. Su diente que cuelga huerfano en su mandibula nunca encontrara hogar ni familia, solo un sufrimiento digno de quien no usa campanas.

Cuando camino por el campo siento a la avena crecer a la muerte, me ensordesco con los petalos al viento y las hojas razgan mi vista. Cuando me abrazo con la tierra, ella se pone negra y muere arcillosa. Y es en ese momento en que comprendo que toda mi vida he estado en lugares sin ranas, relojes ni campanas.

No hay comentarios: