miércoles, 22 de junio de 2011

Tertulia Griega

Dicen que cuando un ciego entra, es por que debes darle un vistazo a tu vida, como el medico de visita que pasa a saludar aprovechando la instancia que no carece de sustancia, no nos engañemos.

Ver el café invitado a pintar lo que no terminaba de ser una barba y dejaba de ser patilla me impulso a conversar. Me conto de todo, se reservo nada y parecía que la noche nos cobraba en pequeñas cuotas.

Cuando se fue ya era de amanecida. Me pare para encontrarme solo en el sueño de un local que alguna vez fue brillante y energico, ahora frío e igual de opaco. En ésta pequeña tertulia griega que recibí por gracia me digne en pensar en los dioses, ahora muertos y maltrechos, con sus románticos valores vendidos y malversados, con sus templos en horarios y llenos de flashes fríos.

Antes de retirarme deje la propina, dos monedas de oro.

1 comentario:

José A. García dijo...

Los dioses no están muertos, lo eterno no puede morir, sólo están olvidados, a la espera de que el hombre vuelva sus ojos, otra vez, a algún aspecto de su naturaleza divina.

O eso dicen los monoteistas...

Saludos

J.